Cuesta creer que ahora es cuando el gobierno nacional se da por enterado de la campante corrupción de varios de sus funcionarios, incluidos ex-presidentes y ministros. Varios gerentes han sido encarcelados de igual manera pero peces gordos como anteriores directores no se les toca ni con el pétalo de una rosa.
Debemos recordar que el TSJ impidió las averiguaciones que la Asamblea Nacional quería impulsar a Rafael Ramírez y su gestión en PDVSA y el Ministerio de Energía y Petróleo. ¿Será que el gobierno ahora entiende la función contralora de la Asamblea?. Tantas auditorías hechas sin resultados que ahora si salen a la luz con intenciones presidenciales conocidas por todos.
La gestión de la fiscalía y la contraloría se ve empañada por su no hacer nada a pesar de las múltiples denuncias hechas por distintos medios sobre los malos manejos de PDVSA.