La semana pasada el Banco Central de Venezuela (BCV) emitió una serie de bonos con el fín de intervenir de manera directa en el mercado permuta de divisas, sustituyendo a PDVSA como el ente encargado de estas funciones y cuyo fín es el de disminuir la tasa cambiaria de ese mercado ya que es el utilizado como indicador por todos en Venezuela al no tener acceso a los dólares preferenciales y de libre acceso a través del gobierno.
Estas emisiones se realizaron de manera ilegal, toda vez que no existía legislación para la fecha que facultara al BCV a emitir dichos papeles, contradiciendo la Ley de Ilícitos Cambiarios. De igual forma, muchos funcionarios, incluído el presidente de la república han hecho mención del dólar paralelo y su mercado, a sabiendas que esto constituye un desacato de la ley.
Entonces la pregunta de rigor es ¿dónde está el Tribunal Supremo de Justicia? Al parecer hay diferente categorías de ciudadanos y las personas no son medidas con el mismo rigor. Lo paradógico es que las emisiones se han hecho por 50MM$ y la demanda ha sido de unos 300MM$, por lo que el esperado bajón estimado por el gobierno no parece factible, al menos en las proporciones esperadas.
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