Carmelo Marzullo, profesor universitario de física en la Universidad de Oriente, acaba de culminar un trabajo de investigación sobre por qué su salario está tan devaluado. Típico de un físico que pasa la vida en búsqueda de explicaciones, usando fórmulas que le revelen causas y efectos. El primer porqué del déficit salarial inició en el año 2004. Para entonces comenzó lo que él llama "una caída sostenida en los incrementos salariales de los profesores": ese año, el incremento debió haber sido de 56%, pero el gremio sólo recibió un aumento de 13%. "Si observamos el histórico de los incrementos salariales para profesores, y aplicamos el método de poder adquisitivo, se obtiene que el aumento que debimos haber recibido era de 56% para mantener el mismo nivel que en el año 2000, sin embargo recibimos menos de la mitad", explica Marzullo.
En el año 2000 el aumento decretado para los profesores universitarios del sector público fue de 121%. El más alto que han recibido en los último 14 años, y el que logró que los profesores nuevamente adquirieran dignidad laboral. Con este aumento, el Gobierno ganó la buena voluntad del gremio. Pero de aquel aumento sólo queda el recuerdo. Hoy, los profesores se mantienen con Bs. 1.030 la quincena, con suerte. Una quincena de un profesor universitario con categoría de instructor de dedicación exclusiva, oscila entre 900 y 1.100 bolívares, dependiendo de las deducciones que tenga por seguro de salud. Y si es un profesor titular con doctorado y 20 años de carrera, la quincena podría alcanzar 1.600 bolívares con las deducciones. La tabulación salarial de los profesores universitarios del sector público está estática desde el año 2010, cuando el presidente Chávez les aprobó un aumento de 40% lineal vía decreto. Para la fecha los ánimos de los profesores de hacer paro indefinido se calmaron. Hasta ahora, que vuelven a sentir lo ineficiente de los aumentos lineales, en vez de aumentos progresivos.
Desde el año 2008, la convención colectiva de los profesores universitarios continúa sin homologarse, razón por la que en el último mes la escena de la educación universitaria se ha visto interrumpida por llamados a protestas, paros indefinidos, marchas y horas 0. Lourdes Ramírez de Viloria, presidenta de la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) ha sido una de las profesoras líderes que ha venido solicitando la pronta homologación del contrato y la discusión de nuevos beneficios contractuales para el gremio. Ramírez asegura que la homologación es la única estrategia para dignificar la situación laboral de los profesores. Es que, de acuerdo con la presidente de Fapuv, la tabulación salarial de los profesores está desfasada respecto a la realidad económica venezolana. Un profesor con dos años de graduado, que decida dedicarse a tiempo completo en dar clases en la universidad pública, devenga Bs. 2.677, y con las deducciones, según sus beneficiarios asegurados, se reduce a una cifra menor a Bs. 1.000. La presidenta del Fapuv, en sus intervenciones con la prensa, desde las marchas universitarias, ha señalado que el aumento de este año debería ser, al menos, de 140%, para cubrir las necesidades básicas de las familias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario