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jueves, 31 de enero de 2013

Oferta de vehículos es muy baja

Los planes del Ejecutivo nacional de convertir al país en una potencia productora de vehículos distan mucho de concretarse: aun cuando las cifras son poco menos que un secreto de Estado, se estima que las dos ensambladoras gubernamentales apenas trabajan a un tercio de su capacidad instalada, lo que significa que su aporte para solucionar el déficit de unidades en el mercado está lejos de ser significativo. Venirauto (empresa creada en conjunto con el Gobierno iraní) y Corporación ZGT (compañía de capital mixto) cuentan con una capacidad de producción de 26.000 y 18.800 unidades al año, respectivamente, según información oficial. Esto significa que de funcionar a capacidad plena, ambas plantas sacarían al mercado cerca de 45.000 unidades al año, lo que representa 43% de los vehículos producidos en el país en 2012 (104.000), de acuerdo con las estadísticas de la Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez).

Pero la realidad de la producción oficial de autos no coincide con los planes trazados. Pese a que se ignoran las estadísticas reales, fuentes ligadas a la planta ubicada en Maracay, Aragua, señalan que la empresa no habría cumplido la meta de 16.000 unidades prevista para 2012. De hecho, las fuentes advirtieron que en el mejor de los casos, la producción sería igual a la reportada en 2011, cuando se ensamblaron unas 4.110 unidades, de acuerdo con la Memoria y Cuenta del Ministerio de Industrias, cifra que significó la utilización de solo 16% del potencial total de la planta y 25% de la manufactura prevista para ese ejercicio (16.000 unidades). Cabe recordar que la baja productividad de Venirauto y la discrecionalidad en la distribución de las unidades fue constatada por diputados de la Asamblea Nacional, cuya Comisión de Contraloría inició una investigación para determinar las causas que han impedido a la empresa elevar el ritmo de ensamblaje luego de seis años de funcionamiento. De hecho, el presidente de la empresa, Rafael Bolívar, reconoció durante su interpelación en el Parlamento que la corporación presenta serias "fallas". Destacó que de las 80.000 unidades que debió ensamblar desde su creación hasta mediados de 2012, apenas se habían producido unos 12.000 carros. Por otra parte, a finales del año pasado se denunció el hallazgo de un "cementerio" de autos de los modelos Centauro y Turpial, los cuales según fuentes cercanas a la planta, habrían sido abandonadas desde 2008 en un terrero destinado a la incorporación del sistema dual de gas natural. La empresa nunca se pronunció sobre el particular.

Aunque con mejores perspectivas, Corporación ZGT, ensambladora de la marca china Chery, tampoco ha podido alcanzar las metas planteadas. Inaugurada en agosto de 2011, al cierre de ese año la empresa -en la cual el Gobierno tiene 51% del capital accionario- solamente ensambló 1.400 unidades, 28% de la meta prevista para entonces (5.000 vehículos). Para 2012, la planta ubicada en la población de Las Tejerías, Aragua, esperaba ensamblar 18.000 unidades, con lo cual alcanzaría a utilizar más de 97% de su capacidad instalada. No obstante, el último dato dado a conocer por el Gobierno permite inferir que el objetivo no se alcanzaría. De acuerdo con lo informado por el ministro de Industrias, Ricardo Menéndez, a principios de septiembre pasado, la corporación había ensamblado unos 8.706 carros en su primer año de funcionamiento, de lo que se desprende que en los ocho primeros meses de 2012 la producción apenas fue de unos 7.300 vehículos. Siempre apelando a las matemáticas a falta de cifras oficiales, los datos aportados por Menéndez permiten definir que la producción mensual de ZGT está en torno a las 910 unidades, lo que posibilita proyectar que al cierre de 2012 la corporación debió ensamblar cerca de 11.000 unidades, 61% de la meta prevista. De cualquier manera, y aun pese a que existe una demanda insatisfecha estimada en unas 150.000 unidades al año, los planes del Gobierno apuntan a que ZGT destine parte de su producción a la exportación. Al respecto, el ministro Ricardo Menéndez señaló a mediados de noviembre pasado que se prevé la incorporación de dos nuevos modelos a la línea de ensamblaje, los cuales serán apartados exclusivamente para ser exportados hacia países del Mercosur. Aunque se desconocen mayores detalles del proyecto, se sabe que ZGT acordó alquilar las instalaciones de una planta propiedad de la empresa Great Wall para ampliar su manufactura, posiblemente con miras a producir allí los vehículos destinados al mercado internacional. Fuente: EMEN.

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