El sector financiero estatal fue uno de los privilegiados en la adjudicación del Bono Soberano 2031; así como las empresas de los sectores alimentos, salud y bienes de capital considerados prioritarios por el Gobierno. El Ministerio de Planificación y Finanzas informó que a las entidades del sector público se les aprobó el 100% de las órdenes de compra, independientemente del monto solicitado. Analistas financieros sostienen que la oferta de este bono de la República (convertible en divisas) tuvo un objetivo claro: alimentar el Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (Sitme).
Barclays Capital indicó en un reporte que de acuerdo con los criterios de asignación, se desprende que la proporción otorgada a la banca pública "fue mayor a lo esperado; nuestra estimación es que se le haya asignado 2.000 millones de dólares de la oferta". La agencia cree que en el mediano plazo habrá una mayor oferta de bonos a ser vendidos en el Sitme, como resultado de la nueva asignación de bonos para el sistema financiero público. La banca privada ha sido privilegiada en emisiones de deuda anteriores, especialmente luego de la salida de las casas de bolsa de las operaciones con bonos de deuda pública. Sin embargo, esta vez, según fuentes cercanas al sector, en esta oportunidad estas entidades quedaron fuera de la posibilidad de compra del bono con vencimiento en 2031.
"Nuestra primera impresión es que el sector privado (en ambas categorías) está recibiendo una menor asignación a la esperada, dada la proporción de la emisión total de 4.200 millones de dólares, especialmente en los sectores no prioritarios que recibieron hasta 6.000 dólares", indicó en su reporte Barclays Capital. La firma dice no entender los criterios de asignación del bono, especialmente porque existe una gran cantidad de empresas que no han podido tener acceso a Cadivi y al Sitme para acceder a divisas de manera legal. "Queremos destacar el castigo que el Ministerio de Finanzas ha decidido dar a los agentes económicos que solicitaron más de los montos de asignación. No se entiende muy bien el razonamiento detrás de esta decisión, ya que los individuos y las empresas que han solicitado más, son precisamente los que no han recibido divisas", destaca. Barclays sostiene que ante el tamaño de la oferta del Bono 2031 y debido a la mayor asignación para la banca pública, no será necesaria una nueva emisión de títulos convertibles en divisas por parte de la República.
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